14 de marzo de 2010
Manelich Quintero
Veracruz, Veracruz.- Albinegros de Orizaba sufrieron en verdad para empatar a un gol con Irapuato, en un juego en el cual además de sus yerros, fueron víctimas del estado de ánimo que se les vino a tierra luego de que se vieron superados por su oponente en el marcador y sufrir la expulsión del argentino Eduardo de los Santos, su armador en medio campo.
Los Freseros se fueron arriba en el tanteador a los 17 minutos de juego con gol anotado por José Gutiérrez, quien aprovechó que estaba solo como torero después de matar al astado, dentro del área de los Chayoteros, para mandar el balón al cobijo de las redes del arco Albinegros.
Albinegros reaccionaron. Empataron a los cinco minutos de la parte complementaria por mediación de Kevin favela que relevó a Gerardo Beltrán.
Pero el descontrol pleno de los dirigidos de Cristóbal Ortega viene a partir de la expulsión absurda de Eduardo De los Santos por una entrada con los tachones por delante a José Gutiérrez ¡A medio campo...!.
Irapuato aprovechó la superioridad numérica. Demás Ignacio Rodríguez (ex porte3ro del Atlante), su nuevo técnico, ajustó las líneas de la escuadra guanajuatense y dominaron las acciones.
Mientras que a Ortega no le funcionaron los movimientos de relevo. La nave hizo agua.
Inició Albinegros proponiendo, buscando el gol por todos los caminos y veredas, pero no lograba capitalizar sus avances y un descuido les cambió todo.
Sí, porque tras el gol que les puso abajo en el marcador, Albinegros vino de más a menos. Bajó su ánimo hasta los talones y naufragaron en la grama del estadio del Paseo de las jacarandas el "Tío" Gerardo Beltrán y el "Mimoso" Emmanuel Gil. El primero fue relevado y el segundo enmendó acciones sobresaliendo en su accionar. Huerta y Meléndez también estuvieron muy por abajo del nivel al que nos tienen acostumbrados.
Durante la primera parte del juego los dirigidos de Cristóbal Ortega volvieron a cometer los errores de desconcentración realizados en otros compromisos, de otorgar libertades al oponente y cederle el balón en manera tonta.
Ello hay que agregarle que las decisiones de Fernando Guerrero juez central, no fueron señaladas con el mismo rasero.
Les perdonó un par de amonestaciones. Ya que la entrada con ambos pies por delante (plancha) y el empellón por detrás, se sancionan, según las Reglas de Juego, con la tarjeta amarilla.
Pero el pecado mayor del silbante fue expulsar a Eduardo de Los Santos, a los 24 minutos del segundo tiempo por una falta dura y ruda, sobre José Gutiérrez a mitad del campo. Si, no fue el mismo criterio que en la acción anterior ya referida.
Este fue el séptimo empareje de Albinegros en el Torneo Bicentenario 2010 de la Liga de Ascenso. Y llevan seis juegos sin conocer la derrota con seis emparejes y un triunfo. Con el mísero punto logrado siguen de la mano con Irapuato ahora en trece unidades.
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